Una novela visual de comedia corta
Alguien me ha robado la comida! es un simulador free-to-play que recoge una experiencia muy novela visual, buscas el misterioso almuerzo perdido. También emplea una estética sencilla inspirada en la mayoría de las novelas visuales de estilo anime.
El juego tiene una reproducción corta, pero Someone Stole MY LUNCH! consigue dejar huella, gracias a su premisa extrañamente casual que convierte una experiencia mundana en un videojuego divertido. También te puede interesar Gotoubun: RE o The Grand Mafia para ver novelas visuales igualmente atractivas.
En el centro de una experiencia relatable
Lo que hace que el juego ¡Alguien robó mi comida! sea extremadamente divertido es que tiene una premisa relatable. Su historia se dirige a todos los que han experimentado la pérdida de comida en una zona de almacenamiento común. Desde los trabajadores de la oficina que pierden su almuerzo en la despensa hasta los niños que miran sus postres favoritos para descubrir que ya no están. Y lo que es peor, el culpable siempre es alguien que la víctima conoce personalmente, y el juego se encarga de que esto entre en juego.
En cuanto a sus gráficos, utiliza una versión simplificada de la novela visual media. Tiene fondos estáticos que capturan el atractivo hogareño de un entorno de oficina. El juego también utiliza múltiples fondos para acompañar visualmente otras localizaciones del juego aparte de la escena del crimen. Sin embargo, volver a la ubicación central donde ocurrió el robo, se siente falta de tensión y afecta ligeramente al juego en general.
Además, el juego tiene un corto recorrido de unos 15 a 20 minutos por carrera. Sin embargo, hay siete finales diferentes, lo que da a los jugadores el incentivo para jugarlo una y otra vez. De ti depende si encuentras al culpable o tienes que seguir viviendo sin resolver el misterio. El juego ofrece incluso un minijuego en el que hay que arrastrar y soltar elementos de la comida cotidiana.
Ve a buscar tu comida
En general, ¡Alguien me ha robado la comida! es un juego imprescindible. Tiene una premisa divertida con la que la mayoría de la gente puede identificarse, una elección de diseño general que es familiar e intuitiva, y un conjunto de finales para que descubras. Estas razones compensan su corta duración, así como la falta de tensión o suspense en sus diseños. Es un juego corto y divertido que tendrás que ver por ti mismo.
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